FICHA
TÉCNICA DEL PRIMER TEMA
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GRADO
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TEMA
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NOMBRE BREVE
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CONOCIMIENTOS
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CAPACIDADES
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LECTURA BÍBLICA
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DEFINICIONES BÁSICAS
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DOCUMENTOS ECLESIALES
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TESTIMONIO
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SALMO
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4º sec.
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Tema 01
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Cuaresma
y conversión
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FCMC
La Cuaresma, tiempo de
conversión: la confesión
TdV
Responsabilidad
con la comunidad a la que pertenece
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CDC
Descubre
la necesidad de vivir la cuaresma como proceso de conversión y reconciliación
con Dios.
DF
Propone
en su proyecto de vida vivir de acuerdo al mandamiento del amor.
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Ezequiel
18,21-28
No quiero la muerte del malvado, sino que se convierta y viva. Vuestro proceder es injusto |
1.Conversión
2.Confesión
3.Vida cristiana
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Catecismo
de la Iglesia
Católica nn. 1427-1428
Benedicto
XVI Cuaresma 2012
Fijémonos
los unos en los otros para estímulo de la caridad
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Conversión
del Dr. Nathanson- Catholic.net
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Salmo
52 Por qué te jactas de tu malicia. El amor de Dios dura por siempre
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DOCUMENTOS ECLESIALES
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Catecismo
de la Iglesia
Católica (nn. 1427-1428)
LA CONVERSIÓN DE LOS BAUTIZADOS
Jesús
llama a la conversión. Esta llamada es una parte esencial del anuncio del
Reino: "El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca;
convertíos y creed en la
Buena Nueva" (Mc 1,15). En la predicación de la Iglesia, esta llamada se
dirige primeramente a los que no conocen todavía a Cristo y su Evangelio.
Así, el Bautismo es el lugar principal de la conversión primera y fundamental.
Por la fe en la Buena
Nueva y por el Bautismo (cf. Hch 2,38) se renuncia al mal y
se alcanza la salvación, es decir, la remisión de todos los pecados y el don
de la vida nueva.
Ahora
bien, la llamada de Cristo a la conversión sigue resonando en la vida de los
cristianos. Esta segunda conversión es una tarea ininterrumpida para toda la Iglesia que "recibe
en su propio seno a los pecadores" y que siendo "santa al mismo
tiempo que necesitada de purificación constante, busca sin cesar la
penitencia y la renovación" (LG 8). Este esfuerzo de conversión no es
sólo una obra humana. Es el movimiento del "corazón contrito" (Sal
51,19), atraído y movido por la gracia (cf Jn 6,44; 12,32) a responder al
amor misericordioso de Dios que nos ha amado primero (cf 1 Jn 4,10).
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Mensaje
de Benedicto XVI - Cuaresma 2012 (n.1)
FIJÉMONOS
LOS UNOS EN LOS OTROS PARA ESTÍMULO DE LA CARIDAD
Queridos
hermanos y hermanas: La
Cuaresma nos ofrece una vez más la oportunidad de
reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: la caridad. En efecto,
este es un tiempo propicio para que, con la ayuda de la Palabra de Dios y de los
Sacramentos, renovemos nuestro camino de fe, tanto personal como comunitario
(…)
Deseo
recordar un aspecto de la vida cristiana que a mi parecer ha caído en el
olvido: la corrección fraterna con vistas a la salvación eterna. Hoy somos
generalmente muy sensibles al aspecto del cuidado y la caridad en relación al
bien físico y material de los demás, pero callamos casi por completo respecto
a la responsabilidad espiritual para con los hermanos. No era así en la Iglesia de los primeros
tiempos y en las comunidades verdaderamente maduras en la fe, en las que las
personas no sólo se interesaban por la salud corporal del hermano, sino
también por la de su alma, por su destino último. En la Sagrada Escritura
leemos: «Reprende al sabio y te amará. Da consejos al sabio y se hará más
sabio todavía; enseña al justo y crecerá su doctrina» (Pr 9,8ss). Cristo
mismo nos manda reprender al hermano que está cometiendo un pecado (cf. Mt
18,15). El verbo usado para definir la corrección fraterna —elenchein—es el
mismo que indica la misión profética, propia de los cristianos, que denuncian
una generación que se entrega al mal (cf. Ef 5,11). La tradición de la Iglesia enumera entre
las obras de misericordia espiritual la de «corregir al que se equivoca». Es
importante recuperar esta dimensión de la caridad cristiana. Frente al mal no
hay que callar. Pienso aquí en la actitud de aquellos cristianos que, por
respeto humano o por simple comodidad, se adecúan a la mentalidad común, en
lugar de poner en guardia a sus hermanos acerca de los modos de pensar y de
actuar que contradicen la verdad y no siguen el camino del bien. Sin embargo,
lo que anima la reprensión cristiana nunca es un espíritu de condena o
recriminación; lo que la mueve es siempre el amor y la misericordia, y brota
de la verdadera solicitud por el bien del hermano. El apóstol Pablo afirma:
«Si alguno es sorprendido en alguna falta, vosotros, los espirituales,
corregidle con espíritu de mansedumbre, y cuídate de ti mismo, pues también
tú puedes ser tentado» (Ga 6,1). En nuestro mundo impregnado de
individualismo, es necesario que se redescubra la importancia de la
corrección fraterna, para caminar juntos hacia la santidad. Incluso «el justo
cae siete veces» (Pr 24,16), dice la Escritura, y todos somos débiles y caemos (cf.
1 Jn 1,8). Por lo tanto, es un gran servicio ayudar y dejarse ayudar a leer
con verdad dentro de uno mismo, para mejorar nuestra vida y caminar cada vez
más rectamente por los caminos del Señor. Siempre es necesaria una mirada que
ame y corrija, que conozca y reconozca, que discierna y perdone (cf. Lc
22,61), como ha hecho y hace Dios con cada uno de nosotros.
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TESTIMONIO
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CONVERSIÓN
DEL DR. NATHANSON
Bernard
Nathanson, médico, escéptico y liberal, casado y divorciado; ya en 1945 había
iniciado su camino de muerte, haciendo abortar a su enamorada. En 1971
dirigió una clínica abortista en Nueva York. Confesó que ha tenido “75.000
encuentros con el aborto”, incluyendo a dos de sus propios hijos. Con la
nueva tecnología del ultrasonido, tomó conciencia de su error, que reconoció
públicamente. En 1984 grabó "El grito silencioso", ecografía de un
aborto con el que mostró a un colega su criminal acción. Años después decidió
convertirse en cristiano católico. En la solemnidad de la Inmaculada Concepción
de 1996, en la Catedral
de S. Patricio de Nueva York, el Dr. Nathanson recibía del Cardenal John
O´Connor el Bautismo, la
Confirmación y la Eucaristía. "No puedo decir – declaró - lo
agradecido que estoy ni la deuda tan impagable que tengo con todos aquellos
que han rezado por mí durante todos los años en los que me proclamaba
públicamente ateo. Han rezado tozuda y amorosamente por mí. Estoy totalmente
convencido de que sus oraciones han sido escuchadas. Lograron lágrimas para
mis ojos". Falleció el 21 de febrero del 2011. Un activista pro-vida
declaró: “Él será recordado como un gran defensor de los bebés. Quienes le
conocíamos bien sabíamos que sentía un dolor profundo por lo que había hecho
en su época de abortista. Recuerdo que ayunaba a menudo como penitencia y
reparación por ello”. Así Bernard Nathanson pasó de la muerte a la vida.
(Resumido
de Internet)
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